Es el platillo emblemático de la gastronomía poblana, el mole tiene sus orígenes en la cocina prehispánica de la palabra “mulli” que se puede traducir a salsa o guiso, después, en el periodo colonial se conforma su desarrollo en la cocina del Convento de Santa Rosa. Las recetas pueden variar un poco sus ingredientes, pero los esenciales son: chocolate amargo, chiles anchos, chiles mulatos, chiles pasilla, chipotle, almendras, plátano, nueces, pasas, ajonjolí, clavo, canela, perejil, pimienta, cebolla, ajo y tortillas, se sirve con carne de pollo o guajolote.
Sugerencia: Lo puedes encontrar en fondas o restaurantes del municipio y en los pasillos principales del Mercado Municipal, se ofrece entre los diversos guisados del menú diario, también es típico encontrarlo en temporada de Todo Santos, para ofrendarle a los difuntos o en eventos importantes de convivencia familiar, como bodas, cumpleaños, fiestas patronales, graduaciones, etc.